Lacaniana |
Número 13 |
La orientación Lacaniana |
El desorden simbólico |
Jacques-Alain Miller Lo simbólico es un orden. Al menos Lacan lo introduce en 1953 en calidad de orden y así cimienta la revolución teórica y transferencial que emprende en el psicoanálisis. Que lo simbólico fuese un orden era un sueño, dije la vez pasada. Era el sueño estructuralista de un “universo de las reglas” –expresión de Lévi-Strauss que es el título de un capítulo de Las estructuras elementales del parentesco–. Es el sueno de un universo en el cual cada cosa esta en su sitio, en un sitio asignado y prescrito por una regla. Ese sueño forjó sin duda la pregnancia imaginaria del estructuralismo. Este celebró lo simbólico como un orden, como una potencia de orden que asigna su ser y su sitio a toda cosa y a toda imagen. Por extraño que pueda parecernos hoy, Lacan renovó la noción del inconsciente freudiano a partir de eso... |