Para suscribirse a EOL postal escribir a equipoeolpostal@gmail.com
Publicaciones
On line

Virtualia
Entrelibros
Cuatro+Uno
El Caldero Online
EOL Blog
Boletín Discontinuidad
Lacan Quotidien | Lacan Cotidiano
Referencias en la obra de Lacan
e-textos
Otras publicaciones on line
Jacques-Alain Miller on line
 
Entrevista de actualidad 29

Armelle Gaydon, Salvatore Maugeri, Franck Rollier:
A propósito de la conversación de Juan-Les-Pins
Martes 9 de diciembre de 2008
Difundida en ecf-messager & archivada en forumpsy.org

FRANCK ROLLIER: La conversación de Juan-Les-Pins.
Dos medios días de conversación acaban de terminar en Juan-Les-Pins, a partir de los folletos electrónicos de los CPCT de Antibes y Marseille y de las Secciones clínicas de Aix-Marseille y de Nice. 80 personas estuvieron presentes, la mitad de Bouche du Rhône, la otra mitad de la Côte d´Azur.

Sábado
Con un ritmo ágil, modulado por las intervenciones de Jacques-Alain Miller, y con la participación activa de numerosos colegas de las Secciones clínicas y de las ACF de nuestras dos regiones, la conversación rodó sobre la gran pregunta del momento: ¿Cómo "achicar las velas" de los CPCT, preservando su valor de experiencia?

Jacques-Alain Miller propuso a la discusión los 7 puntos que había comunicado al final de la conversación en el CPCT-Chabrol, el 22 de noviembre último, recordando la necesidad de repensar las exigencias del discurso analítico, lo que implica en particular despegarse del entusiasmo grupal y prevenirse contra la ingerencia de la administración en nuestra soberanía. Alentar el espíritu de empresa y las iniciativas exteriores en los CPCT, les permitiría a estos -volviéndose más esbeltos- consagrarse a la clínica y la formación de los psicoterapeutas (cuando el decreto esperado haya precisado las condiciones).

El desarrollo programado de un tratamiento que apunta a un resultado en 16 sesiones, se opone precisamente a la posición del analista, quien se abstiene de utilizar los elementos de poder de la sugestión. ¿Cómo nombrar entonces a los CPCT, estando más cerca de lo que hacemos? ¿Conviene que esta clínica continúe practicándose bajo el significante "psicoanálisis"? ¿o bien, hay que preferir el término "psicoterapia"? Como remarcaron muchos participantes reticentes, ese término recubre un número de prácticas desprestigiadas.

La gestión, que debe estar separada radicalmente de la clínica, fue igualmente puesta en cuestión; los reajustes fueron evocados: si hay que preservar las adquisiciones obtenidas, gracias a alguna municipalidad condescendiente, ¿es necesario, igualmente, continuar con la búsqueda de subvenciones?

Sobre la vertiente clínica, ¿habrá que tocar el tiempo limitado y la gratuidad?

Muchos casos presentados por jóvenes colegas, todos salidos de las Secciones clínicas, mostraron la actualidad de esas cuestiones en la clínica de los CPCT. Ellos testimoniaron también de efectos de formación, de una formación, pero que no es, sin duda, la formación del analista.

Domingo
La mañana siguiente, consagrada a la discusión sobre las Secciones clínicas, fue la ocasión de volver sobre la historia de la Sección clínica, desde su fundación hace 30 años. Jacques-Alain Miller resituó las Secciones clínicas y los CPCT en el sistema más largo y diversificado que es el Campo freudiano en el mundo, donde debe prevalecer, antes que nada, la preocupación de la autenticidad frente a las imposturas.

En Juan-Les-Pins, frente al mar y el horizonte despejado, tuvimos la suerte de vivir dos secuencias excepcionales, por la libertad de tono y el esfuerzo de pensamiento de los intervinientes, comprometidos en el movimiento de un Work in progress animado por Jacques-Alain Miller, quien nos ofreció -según las palabras del final de Hervé Castanet-, un verdadero momento de felicidad.

ARMELLE GAYDON. Algunos puntos importantes.
Introducción por F. Rollier: el Otro social nos demanda tener una relación con él. De ahí el riesgo, muchas veces señalado, de hacer de los CPCT algo al servicio del discurso del amo. De ahí, también, la interrogación que situamos en el centro del debate: "¿Qué hay de psicoanalítico en lo que hacemos?"

Cuestiones abordadas: la modificación del nombre de los CPCT, evocada por Fabien Grasser (Centro Psicoterapéutico de Consultas y Tratamiento); achicar la vela de los CPCT es un principio adquirido: ¿hasta qué punto?

JACQUES-ALAIN MILLER
Siete puntos después de la conversación con el CPCT-Chabrol:
1. Supresión de la RIM
2. La gestión de los CPCT
3. Selección de los pacientes
4. Selección de los intervinientes
5. El desmembramiento del CPCT-Chabrol
6. La permutación
7. La gratuidad

Discusión

Supresión de la RIM. Reunión institucional mensual de los CPCT. Institución "nefasta y equivocada" que mezclaba clínica y gestión. Reunir 90 personas todos los meses provoca un efecto de identificación colectiva infalible, la captación imaginaria en un grupo "nosotros" que promueve los efectos de grupo y un "entusiasmo que es más bien un afecto del que hay que desconfiar", "conduciendo a persuadirse de que somos los mejores, con el bien-estar, favoritismo, solidaridad y familiaridad, en lugar del Malestar en la Civilización". Lacan escribe en L´Etourdit haber querido proteger a la Escuela de las obscenidades de los efectos de grupo. La fuerza del discurso analítico reposa en la abstención de cierto número de medios. El CPCT debe operar esta operación de sustracción. Las reuniones clínicas plenarias son para rever. En Marseille se hacen en dos grupos diferentes.

La gestión de los CPCT: debería ser el objeto de un informe escrito, una o dos veces por año.

Selección de los pacientes: no es bueno confiar a los organismos exteriores la tarea de seleccionar los pacientes de los CPCT. Antibes y Marseille no pasaron por ese tipo de convención. F. Grasser propone parar ese tipo de convención en Paris. Se trata también de cuestionar la pertinencia de la selección de pacientes por los equipos del grupo A en los CPCT (la necesaria demanda del paciente, la cuestión de los pacientes crónicos...).

Selección de los intervinientes, o consultantes de los CPCT: el Atelier de psicoanálisis aplicado. La APA, creada antes del CPCT, debía enviar al CPCT pasantes. Ellos se quedaron y se los llama "psicoanalista". Le pertenece solamente a la Escuela reconocer esa cualidad. En Antibes se los llama"consultantes-psicoanalistas". En Marseille: "consultantes".

El desmembramiento del CPCT-Chabrol: JAM propuso deslocalizar las unidades especializadas (Precaridad, Mujeres maltratadas..) y dar la propiedad de esas unidades a sus animadores. Esta idea no suscitó entusiasmo en Paris. La cuestión no se plantea en Antibes y Marseille.

La permutación: debe ser la regla, incluido para los directores.

La gratuidad: la gratuidad parecía implicar un tiempo limitado. Ella será debatida. ¿Cómo hacer? Dos sectores en cada CPCT, uno gratuito y uno que no lo sería? El caso de una paciente que insistía en pagar y se fue.
Otros puntos abordados

La relación al psicoanálisis puro. Los CPCT estaban orgullosos de anunciar que la gente no hacía un análisis después de las 16 sesiones en el CPCT ¿No hay que liberarse de esa picota?

El manejo del tiempo en 16 sesiones: los practicantes del CPCT hablan de "administrar" ese tiempo impartido ¿Cómo manejar esta variable? ¿Cómo terminar el tratamiento? ¿Hay que levantar el límite de las 16 sesiones? Los CPCT fueron concebidos como una "experiencia lacaniana de las TCC: una experiencia lacaniana del tiempo corto" (J-A Miller) con la idea de forzar y acortar el tiempo para comprender, lo que obliga a focalizar sobre el síntoma aliviado en la queja, dar lugar a un procedimiento y evaluar el resultado. Esto se opone punto por punto al discurso del analista, donde la primera suposición es que no comprendemos el discurso del paciente. Se trataba entonces de crear un laboratorio experimental de psicoanálisis aplicado con psicoanalistas y pasantes de paso, de hacer psicoanálisis aplicado, en la medida en que aceptamos ciertas limitaciones en el poder del acto analítico. La experiencia desbordó ese marco.

El debate abierto desde las Jornadas: "Estamos ahora para preparar el momento de concluir" (J.-A. Miller). "Quería hacer una pequeña experiencia, pero se hizo como con la nitroglicerina: puse una gota y eso tuvo un poder explosivo. Logramos que ésta se expanda por todas partes. Es eso lo que da miedo: trabajamos en nombre del psicoanálisis para el discurso del amo!"

Acogida de pacientes: Marseille y Antibes tienen un recibimiento telefónico hecho por psicólogos y analistas formados en la Sección clínica, de los cuales una de ellos es empleada en tanto psicóloga y la otra en tanto secretaria. Ellas filtran y orientan las demandas, luego transmiten los datos a los consultantes; están igualmente a cargo del secretariado y del establecimiento de las estadísticas. Esta "clínica por teléfono" (J-A Miller) es original. "La clínica es otra cosa que el psicoanálisis. Es una localización objetiva de signos e índices que permiten clasificar; entonces, puede hacerse por teléfono. Si tuvieran un local de acogida, harían de otra manera".

Finalidades y funcionamiento

Subvenciones. La discusión llevada sobre la idea de renunciar a toda modalidad de subvención, cualquiera sea la forma, y de no desalentar a aquellos de entre nosotros que desearían montar pequeñas empresas con el Otro social, con las subvenciones: Jacques- Alain Miller: "no tiremos el bebé junto con el agua de la bañadera". Tenemos las mejores relaciones con las autoridades, conservémoslas. Pero dejemos a aquellos que desean trabajar con las subvenciones, ellos lo harán sin comprometer a la Escuela, a título personal, y ocuparán la periferia del Campo freudiano, con nuestra ayuda".

¿Cambiar el nombre de los CPCT?: al principio los CPCT debían funcionar con los psicoanalistas (especialmente los AE) y algunos pasantes. El nombre "Centro Psicoanalítico" estaba todavía justificado. Cambiar el nombre a "Centro Psicoterapéutico", se pagaría con una disminución del interés, porque es una palabra menospreciada. La verdadera cuestión es: ¿Cómo no estar en la impostura? Hablar de Centreo psicoanalítico tiene el interés de poner al psicoanálisis en el centro de las elaboraciones. La cuestión queda abierta.

Los pasantes. Se trató el problema del término "pasante", si los consultantes de rango B son, como en Antibes, personas en análisis desde hace 10 años, y desde hace mucho tiempo inscriptos en la Sección clínica. Jacques-Alain Miller subraya que, si están verdaderamente desde hace 10 años en análisis y en control – lo que no parece ser una modalidad de selección obligatoria en los otros CPCT- entonces, "lo mínimo que se puede hacer es llamarlos psicoanalistas en formación". Por otra parte, una comisión deberá asumir en las condiciones lo más transparentes posibles, la selección de los consultantes, lo que está lejos de ser el caso actual.

El CPCT lugar de formación. Dos opciones parecen dibujarse. 1) o bien el CPCT se orienta hacia ser un lugar de pasantía para un futuro instituto de formación de los psicoterapeutas (art. 52). En ese caso, habría que suprimir la palabra psicoanálisis en el nombre de los CPCT ; 2) la otra opción es ver de qué manera puede haber lugares de psicoanálisis aplicado, entre los cuales estaría el CPCT. JAM: ¿Cómo crear un CPCT más conciente de sus responsabilidades respecto del discurso analítico?

Informe releído por Jacques-Alain Miller

SALVATORE MAUGERI: En el après coup de la conversación.
Estimado Jacques-Alain Miller,
Si su venida a Juan-Le-Pins tuvo un efecto en mí, es el de lo posible, la posibilidad de dirigirme a usted, al menos para hacerle una proposición, en primer, lugar sobre las secciones clínicas pero también sobre el CPCT.
Por la Sección clínica, incluso un poco como una vieja pareja, me queda todavía reflexionar sobre lo que podría evitar la rutina para mantener o relanzar el deseo, es cierto que quedo comprometido en el seno de una Escuela por defender una causa, la del psicoanálisis, la de la ética del psicoanálisis. Tengo ideas, pero debo antes elaborarlas: la creación y la co-animación de Ateliers de clínica borromea, de actualidades sociales del psicoanálisis y de terapias, de psicoanálisis aplicado.
Estoy también muy interesado en una presentación clínica de niños en Nice, pero los institutos contactados hasta ahora se muestran muy reticentes a ese dispositivo.
Esperando, iré a aquellas que organiza Jacques Ruff en Gap, incluso un día a las que realiza Pierre Naveau en Paris.
Para responder también a su pregunta "Cómo podríamos ser conocidos no solamente de manera local?", buscaré el medio de enviar algunos de mis textos a la redacción de algunas revistas como La lettre mensuelle, La petite Girafe...
En términos de abertura, estaría la posibilidad de hacer encuentros inter-Secciones Clínicas donde yo podría acompañar a un profesor de la Sección y hacer una exposición de un tema que sería trabajado por otra Sección clínica. La única vez que hice una cosa que se acercaba a esto fue el 8 de diciembre de 2007 cuando acompañé a Franck Rollier en el marco del Atelier de psicoanálisis aplicado en Paris. Algunos participantes me pidieron mi texto que le envié a Marie-Hélène Brousse y que ella enseguida transmitió a los participantes. En el marco de la ACF, pude participar de las Jornadas-Conexiones, muy enriquecedoras, porque reunió alrededor de una mesa a un magistrado, un filósofo (Jean- Bernard Paturet) y psicoanalistas: presenté un texto sobre el secreto y la responsabilidad, en el momento en que algunas instituciones expresaban fantasmas de transparencia. J-B Paturet me solicitó que desarrollara más mi texto para poder trabajarlo y presentarlo con sus estudiantes en Montpellier.
Podría enviarle esos textos si lo desea (o bien otros también).
Escuchándolo distinguir, en el seno de los CPCT, los que por un lado se orientarían hacia los tratamientos cortos y, por otro, los que podrían dirigirse hacia tratamientos más largos, me vino la idea de proponer Centros de Tratamiento Posible en Psicoanálisis (CTPP) como medio de incluir en nuestros aparatos nuestra preocupación de autenticidad. Me apoyo en el título de la obra de Lacan De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible... En efecto, jugando sobre el equívoco significante posible, dejaría entender la posibilidad o no de llevar un tratamiento con un sujeto, especialmente un sujeto que apuntaría en su demanda únicamente a la terapéutica. Nos corresponde a nosotros plantear todas las cuestiones preliminares y ser suficientemente atentos en el tratamiento corto: sería una dirección del tratamiento un poco como lo que se hace ya en el CPCT. Apuntando al alivio ligado, ya sea a la pacificación del goce ya sea a los efectos de sentido y de significación.
Sin embargo, si recibimos sujetos que tienen una demanda analítica o sujetos cuyos primeros efectos terapéuticos obtenidos despertaron la pregunta del análisis, quizá ese sería también el lugar donde se trabajaría también la posibilidad de desembocar en un análisis, ya sea con otro analista en privado ya sea consultando él mismo fuera del Centro (bajo reserva de poder liberarse financieramente del Otro social, para que no se nos pueda acusar de clientelismo).
Estas ideas no valen quizá gran cosa, pero quería dirigírselas. Lo encontré a usted conmovedor y dinámico. Deseo agradecerle por su venida a Juan-Le Pins, por todos los esclarecimientos que nos ha aportado (especialmente sobre las trastiendas de la Escuela, los desafíos políticos amenazadores para el psicoanálisis...) y, sobre todo, por habernos dado la palabra (a nosotros, los jóvenes) y por habernos permitido expresar cosas importantes, preguntas que nos preocupan, sobre el lugar y el porvenir del psicoanálisis, nuestro porvenir en tanto analista y/o en tanto miembro de la Escuela.
Suyo,

Publicado en 74 Rue D‘Assas en París 6è por JAM

 
Traducción: Damasia Amadeo de Freda